Se colocarán siete mallas metálicas y una red de cable de acero de protección en el talud de la ladera contigua a la RM-513
La Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, a través de la Dirección General de Carreteras, ha adjudicado las obras para la instalación de un nuevo sistema de protección contra desprendimientos en la carretera RM-513, por un importe total de 258.432 euros. Esta vía da acceso a Abarán desde la autovía A-30 (Cartagena-Albacete).
Según indicó el director general de Carreteras, José Guijarro, "con la instalación de este sistema de protección contra la caída de piedras sobre la calzada se refuerza la seguridad vial en los más de cinco millones de desplazamientos que tienen lugar cada año entre el municipio de Abarán y la autovía Cartagena-Albacete".
Las obras, que se iniciarán en las próximas semanas, consisten en la colocación de siete mallas metálicas, de entre cuatro y cinco metros de altura, y de una red de cable de acero de protección de 200 metros cuadrados en el talud de la ladera contigua a la vía autonómica RM-513.
"Debido a la envergadura de los elementos de protección, se utilizarán grúas para la colocación de las mallas metálicas en aquellos puntos en los que la dificultad de acceso sea mayor", explicó el director general, quien matizó que "el diseño adoptado procurará unas condiciones mayores de seguridad ante la erosión de la ladera, especialmente en caso de fuertes lluvias".
Para determinar el nuevo sistema de protección, la Dirección General de Carreteras ha tenido en cuenta diversos factores, tales como la inclinación del talud y su geometría, la composición superficial de la ladera y el grado de fracturación en los focos de desprendimiento, con el objetivo de garantizar la máxima seguridad de los conductores.
